jueves, 13 de junio de 2013

elote azul

cosecha de elotes

elotes de colores


elotes normales

elotes amarillos

elote rojo
siembra de elotes
Antes de ser sembradas algunas semillas requieren cierta preparación. Este tratamiento puede bien ser escarificación, estratificación, mojado de las semillas o lavado de las semillas con agua fría o tibia.
El mojado de las semillas es por lo general realizado remojando las semillas en agua tibia durante 24 a 48 horas.[1] El lavado de las semillas es muy común en el caso de frutas (ya que la carne de la fruta que rodea la semilla puede ser rápidamente atacada por insectos o plagas.[2] [3] Para limpiar la semilla, por lo general se frota la semilla con un trozo de género o papel, y a veces se procede al lavado de la semilla.[4] Por lo general el lavado de las semillas se realiza sumergiendo las semillas durante unos 20 minutos en agua a una temperatura de 50 °C.[5] El agua tibia a caliente mata los microorganismos que pudieran haber sobrevivido en la superficie de la semilla. Las limpieza con agua a alta temperatura es muy importante en semillas de frutas tropicales que pueden ser infectadas con facilidad como por ejemplo lichis y rambutáns.
Además de los procesos de preparación indicados previamente, la germinación es favorecida si se utiliza tierra libre de enfermedades. Especialmente si se trata de producir la germinación de semillas particularmente difíciles (tales como algunas frutas tropicales), el tratamiento y preparación previo de la tierra (junto con el uso de tierra con los minerales y condiciones de acidez más adecuadas, tierra preparada u otro substrato apropiado) es sumamente importante. Los dos procesos de preparación de la tierra más utilizados son pasteurización y esterilización. En general es más conveniente elegir la pasteurización ya que la misma no mata todos los microorganismos. La esterilización puede ser utilizada cuando se intenta plantar vegetales especialmente difíciles. Para pasteurizar la tierra, la tierra debe ser calentada durante 15 minutos en un horno a una temperatura de 120 °C.[5]


cosecha de elotes
El rendimiento del maiz y en general para todos los cultivos, no puede ser alterado una vez que la planta ha alcanzado su madurez fisiológica, es decir, cuando el grano llega a su máximo contenido de materia seca. Sin embargo, para mantener la producción hasta su comercialización es necesario sacarla del campo oportunamente. No hacerlo, significa un deterioro en la cantidad y calidad del grano, lo que se traduce en menores utilidades para el agricultor.
El grano llega a su madurez fisiológica cuando su contenido de humedad es airededor del 37-38 por ciento. La cosecha mecanizada se puede comenzar cuando el grano tiene aproximadamente un 28% de humedad, no siendo recomendable que descienda a menos del 15% Arriba o abajo de estos limites, los granos se aplastan, se parten o puíverizan.
Cuando la cosecha se realiza en forma manual estos limites no son tan importantes y más bien dependen de las condiciones climáticas, mano de obra disponible y hábitos tradicionales.
En general, en superficies hasta 12 hectáreas aproximadamente, la cosecha manual es practicable y no presenta mayores problemas si se realiza oportunamente y las condiciones climáticas son favorables.
En general las formas más comunes de cosecha son: manual, semimecanizada y mecanizada.
Cosecha manual
Por lo general, antes de efectuar la cosecha manual, es práctica común dejar el maíz en el campo adherido a las plantas por un tiempo variable que depende de diversos factores como 105 ya mencionados, durante el cual el grano se seca en forma gradua